Reunidos en nuestro patio de honor rememoramos el día en que hace 13 años, el R.P. Marco Tulio Rivera Jiménez, nuestro Director, recibió el sacramento del Orden Sacerdotal, hecho que vivimos con regocijo todos quienes lo conocemos.
Con certeza desde nuestra vivencia de cristianos católicos, un sacerdote casó a nuestros abuelos, a nuestros padres… uno nos bautizó cuando éramos pequeños, otro nos habrá dado la Primera Comunión, la Confirmación. Otros habrán estado presentes en el funeral de algún ser querido, o acompañando a algún enfermo de nuestra familia. En fin, siempre tenemos la oportunidad de ser testigos de la misión de los sacerdotes.
Sin sacerdotes, el mundo estaría sin la luz de la Eucaristía, que alumbra nuestra existencia. Sin sacerdotes, el mundo estaría a la deriva, al no tener quien lo oriente en nombre de Dios. Cristo fundó una Iglesia, que es columna y fundamento de la verdad, y en ella el sacerdote es quien irradia la luz de sus enseñanzas, da el perdón en nombre de Dios y es el intercesor, que habla cada día a Dios de los hombres y a los hombres habla de Dios, la vocación al sacerdocio es como un poema de amor entre Dios y el hombre; y es la aceptación para servir con un corazón totalmente libre… a todos.
Durante la oración de la mañana, dimos gracias a Dios que lo eligió para decir que el amor está vivo, y pedimos por su ministerio.
La comunidad seminarista en pleno reconoce su inquietud permanente del R.P. Marco Tulio Rivera Jiménez por mejorar la imagen institucional. Que Dios bendiga su gestión para que siga dirigiendo con sabiduría a nuestra institución educativa.
El Prof. Marco Díaz presentó el saludo al Padre Marco Tulio, a nombre del Personal Seminarista. A nombre de los estudiantes, el niño de 5º de Primaria Humberto Antonio Fernández Ulloa, expresó emotivas palabras de saludo y felicitación.
Los niños del Coro Seminarista interpretaron el bonito tema AMIGO, dirigidos por la Prof. Carla González Sarmiento, convencidos que nadie puede brindarnos mayor amistad que un sacerdote, que como pastores nos conducen a la amistad suprema, la Amistad de Cristo. Por eso el sacerdote debería ser nuestro mejor amigo ¡Qué alegría tener un amigo Sacerdote!
Con una marinera de Piura, ciudad del eterno sol y capital de la hospitalidad; y tierra del R.P Marco Tulio, la Banda de Música dirigida por el Prof. Enrique Palomino interpretó “San Miguel de Piura”, bailaron los docentes Ana Landeras y Bladimir Blanco.
Al termino de la ceremonia de saludo, Padre Marco Tulio expresó su agradecimiento y la felicidad por ejercer el sacerdocio, de seguir al Maestro Jesús con el corazón palpitante de amor sacerdotal.
Cuidemos, acompañemos a nuestros sacerdotes y recemos por ellos.
Padre Marco Tulio: Que el Señor lo bendiga hoy y siempre